En cada área de nuestra vida donde hemos logrado algún tipo de avance o éxito, sin duda la perseverancia ha ocupado un lugar de privilegio.
Concepto: (Lectura Mateo 24:12-13)
- Perseverancia significa ser constantes en algo, ya sea en una actividad
como también en una manera o forma de pensar. La perseverancia es fundamental
en todos los aspectos de la vida.
Esta te
toma de la mano y te conduce permitiéndote avanzar a pesar de las dificultades
y así alcanzar lo imposible. ¿Eres de los que empiezan un proyecto y lo
terminan o perteneces al grupo que comienza una tarea, pero luego la rutina
diaria o las dificultades los aplastan y no pueden terminar aquello que con
tanto entusiasmo habían comenzado? En cada área de nuestra vida donde hemos
logrado algún tipo de avance o éxito, sin duda la perseverancia ha ocupado un
lugar de privilegio.
En Mateo 24: 12-13 leemos lo siguiente
"Habrá tanta maldad que el amor de muchos se enfriara, pero el que se
mantenga firme hasta el fin será salvo". Este pasaje nos enseña que al
llegar los últimos tiempos habrá un crecimiento significativo de la maldad,
esto hará que muchos cristianos decaigan en su amor y fidelidad a Dios. Sin
embargo las circunstancias difíciles, las tentaciones y los problemas no deberían
ser una excusa para darle la espalda a Dios, el espera fidelidad, constancia,
perseverancia hasta el fin, es decir hasta el último día de nuestra vida.
Esto es
así debido a que Dios comenzó una obra en cada uno de aquellos que lo aceptaron
como Salvador y esta obra no puede detenerse o ser interrumpida.
Dios
comienza su obra en tu vida y la termina en un espacio de tiempo específico
(Filipenses 1:6). Nada es instantáneo. Por tanto, para concluir su propósito
necesita de nuestra parte perseverancia, de lo contrario esta obra quedaría
inconclusa y esto sería una gran tragedia.
Su plan o
su obra consiste en:
• Transformar tu
vida (Romanos 12:2)
Esta
transformación comienza con un cambio de mentalidad, y luego prosigue con un
cambio en tu manera de vivir. Es como cambiar los muebles de tu casa, primero
debes sacar los viejos muebles para luego tener el espacio suficiente y así
colocar los nuevos. Los muebles viejos son las mentiras o conceptos errados que
forman parte de ti, los muebles nuevos son las verdades de la palabra de Dios,
verdades que aplicadas a tu vida producirán una transformación positiva. Para
que esto tenga efecto es imprescindible tu permanencia y fidelidad mientras se
lleva a cabo el proceso, de lo contrario el cambio nunca será realizado.
• Cumplas un
propósito específico.
Este
propósito afectará a aquellos que están a tu alrededor o también como en el
caso de San Pablo la vida de las generaciones venideras.
"No es que ya lo haya conseguido todo, o que
ya sea perfecto. Sin embargo sigo adelante esperando alcanzar aquello para lo
cual Cristo Jesús me alcanzo a mí." (Fil. 3:12)
En otras
palabras lo que Pablo dice sería más o menos así, "todavía no terminé de
realizar el proyecto que Dios tiene conmigo ni tampoco soy perfecto, pero sigo
adelante, prosigo, sigo perseverando de esta manera lo conseguiré."
Estás en
este mundo para cumplir con un propósito maravilloso dentro de los planes de
Dios, este será revelado poco a poco, pero para que este tenga eficacia y
alcance gran proyección es necesaria la perseverancia. Permite a Dios trabajar
en tu vida, no retrases su obra en ti.
En este
tiempo y en los años siguientes él estará moldeando y formando vasos de honra
que tendrán un contenido único, un tesoro valioso para cumplir una función
especial y diferente. Lo que Dios pondrá en ti será para paliar las
problemáticas y las necesidades de las generaciones venideras, generaciones
únicas y con dificultades diferentes a las que podemos distinguir en nuestros
días y tú serás el portador de la gracia de Dios que ellos necesitan. No te
reveles con Dios ni te sorprendas si el trata contigo de una manera distinta a
lo habitual, es que él te está preparando para que veas cosas que otros no
vieron, camines por caminos que aún no han sido transitados, resuelvas
problemas que nadie ha podido solucionar y sueltes en las naciones un óleo de
restauración para todos los afligidos.
Veamos una historia
que se desarrolla en Jeremías 36 que nos enseña
una lección
importante sobre la perseverancia
Jeremías
era un profeta del AT que tenía la difícil misión de confrontar a una nación
que se había olvidado de Dios y se había entregado por completo a la idolatría,
apostasía y tantos otros pecados abominables ante Dios.
A causa
de su mensaje, un mensaje que denunciaba el pecado y hacia un llamado al
arrepentimiento, Jeremías fue puesto bajo arresto domiciliario, viéndose de
esta manera impedido a concurrir a lugares públicos y declarar abiertamente el
mensaje divino. Recibe entonces el encargo directo de Dios de escribir en un
rollo todos los mensajes que él le había dado desde el comienzo de su
ministerio profético. Jeremías toma a Baruc su ayudante y comienza a dictarle
todos los mensajes recibidos de parte de Dios durante su labor como profeta que
ya contaba con un lapso de aproximadamente 22 años. Las escribe en un rollo y
finalizada la tarea después de un año y nueve meses, Baruc lee el rollo en un
lugar público. Mucha gente es impactada por el mensaje, a causa de esto toman
el rollo y lo llevan a la casa de invierno del Rey Joacim, quien estaba
calentándose junto al fuego, y mientras le leían el escrito, este personaje
inicuo lo iba cortando en pequeños pedazos y los tiraba al fuego a fin de
seguir calentándose, así lo hizo con todo el rollo, hasta quemarlo
completamente.
Poniéndome
en el lugar de Jeremías, pienso que este habrá dicho algo más o menos así:
“¡Señor... Cuánto trabajo... cuánto tiempo desperdiciado...22 años de profecía
transcritos día y noche por el espacio de un año y nueve meses quemados en el
fuego por este rey malvado! No Señor;... ¿Y ahora que hacemos?"
Según el
relato bíblico Dios respondió "HAZLO OTRA VEZ..."
Después
de recibir la respuesta, el profeta hace nuevamente el trabajo pero en esta
oportunidad, hizo cambios. Muchos pensaríamos que esta vez lo hizo más corto
por las dudas de que quemen el rollo nuevamente, pero no, al contrario, añadió
información, es decir que lo hizo mejor y más completo que la primera vez.
Amigo no sé qué has hecho con
todo lo que Dios ha puesto en tus manos, pero aunque hayas fracasado en algún
momento, o no hayas tenido los resultados esperados, no te resignes al fracaso
del pasado, Dios te dice: "… yo tengo un plan que cumplir contigo todavía,
no te desanimes, PERSEVERA... TÚ PUEDES HACERLO OTRA VEZ."
Mario Serrano
Misionera: Nirma Isabel Guerrero Tello Callao- Perú. Cel: 511-990800854